El vino natural es vino. El verdadero vino. El vino que se lleva bebiendo desde hace miles de años, el que trajeron los griegos a la península, el que bebía Don Quijote, el que hacían y bebían nuestros abuelos.
En estos tiempos hemos olvidado esta realidad. El vino natural esta hecho por vitivinicultores, es decir, el agricultor que cultiva la vid es el mismo que elabora el vino, lo embotella y lo vende. Estas microproducciones estan intimamente ligadas a la biodiversidad cultural, a la familia, a la tradición de cada región, de cada municipio, son una lucha contra la estandarización de las variedades, los sabores, las regiones, las personas que lo producen y lo consumen, y, a su vez, genera consumidores críticos y coherentes.
Si nunca has bebido vino natural, lo siento mucho, nunca has bebido vino!
Esto se basa en la confianza, en saber a que persona le compras el vino, el saber cómo lo hace y porqué lo hace. Desde Blin Blin creemos que el mejor sello de calidad es conocer al elaborador, comprender su idiosincrasia y poder hablar con él directamente. Se elabora con uvas cultivadas sin químicos ni abonos de síntesis. Se fermentan como se ha hecho toda la vida, con la levadura que contiene la uva. Se embotella sin la intervención de aditivos, sin sulfitos. Sin filtrados ni clarificados.
Es un retorno a las raíces, a los productos auténticos, a comerciar y alimentarse con la cosecha del vecino y un no a lo producido en una fabrica, al ser atendido por un call center. Beber vino es hacer historia y declarar públicamente tu respeto por la tierra, la naturaleza y las personas que obtienen los alimentos de ella de una manera respetuosa! Blin Blin!